De acuerdo a la International Coaching Federation (ICF), el coaching profesional consiste en una asociación entre el coach y los coachees (clientes o consultantes) en un proceso creativo y estimulante que los inspira a maximizar su potencial personal y profesional.
En cada sesión, el coachee elige el tema de conversación mientras el coach escucha en forma holística y aporta con observaciones y preguntas empoderadoras. Este método interactivo crea transparencia y motiva al coachee para actuar en un marco de extrema confidencialidad y libre de prejuicios.
El coaching no mira hacia atrás, sino que toma como punto de partida la situación actual del coachee y se centra en lo que éste esté dispuesto/a a hacer para llegar a dónde le gustaría estar en el futuro, siendo conscientes de que todo resultado depende de las intenciones, elecciones y acciones del coachee, respaldadas por el esfuerzo del coach y la aplicación del método de coaching.
Puntualmente, la Internacional Coach Federation (ICF) se adhiere a los principios de una forma de coaching que honra y respeta al coachee como el mayor experto en su vida personal y profesional y cree en cada persona como un ser creativo, completo y lleno de recursos.
En este sentido, las responsabilidades del coach son:
- Descubrir, aclarar y definir lo que el coachee quiere alcanzar
- Estimular el auto-descubrimiento del coachee
- Suscitar soluciones y estrategias generadas por el propio coachee
- Mantener en el coachee una actitud responsable y consecuente
Fuente: https://www.icf-es.com/mwsicf/sobreicf/definicion-coaching-icf-espana
Adaptación: Soledad Caldumbide